CAME: camino a la integración de emprendedores
En la Ciudad de Buenos Aires, a través de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), se está gestando la integración y formación de grupos de emprendedores. Por ello la entidad apoya atendiendo necesidades y siendo nexo con funcionarios del GCBA.
Los primeros pasos que se vienen dando apuntan a la identificación de las actividades, que ya se definen como “textiles”, “servicios”, “gastronomía”, “gráficos” y “artesanías”, encuadrando en ésta categoría todo tipo de diseños y creaciones de productos que, sean en serie o no, requieren de un trabajo manual.
Lo que sucede en Capital Federal tiene enormes similitudes con realidades de otras localidades debido a las coincidencias en las necesidades y reclamos por parte de emprendedores que ya están desarrollando actividades, ya que los problemas de comercialización, formalidad, capacitación y créditos son comunes en cientos de personas que buscan consolidar sus micro-emprendimientos.
Muchas veces, los gobiernos locales carecen de políticas acertadas que contemplen el desarrollo de productos artesanales u otro tipo de emprendimiento que no cuenta con el respaldo necesario para formalizarse, mientras que aquellos que sí lo logran también carecen de herramientas para su posterior evolución.
Por ello citamos en Hay que sumar algo destacado desde CAME y la Federación de Comercio de Buenos Aires (FECOBA), que hacen de nexo para que el área de Comercio del GCBA pueda encontrar alternativas que fomenten a los emprendimientos de todos los barrios.
El perfil de quienes hoy se encuentran en esta mesa de trabajo en conjunto es de emprendedores que ya cuentan con una marca propia, con una concreción de su negocio y que padecen los siguientes problemas:
-Dificultades por la falta de financiamiento para comprar más insumos.
-Falta de mano de obra calificada para ampliar producción.
-Imposibilidades de pasar de un monotributo a una figura societaria.
-Altas exigencias bancarias que imposibilitan manejo de cuentas en la formalidad.
-Incentivos a inversión.
-Falta de marcos regulatorios de competencia y permisos.
Por su parte, es positivo que muchos ofrecen sus experiencias y conocimientos para potenciar la cadena de valor en los proyectos, en un contexto de integración empresaria. Por eso, desde CAME ahora están atentos a las evaluaciones de las autoridades mientras que se continuará acompañando a emprendedores en capacitaciones y charlas de debate sobre el desarrollo de los negocios.
Los primeros pasos que se vienen dando apuntan a la identificación de las actividades, que ya se definen como “textiles”, “servicios”, “gastronomía”, “gráficos” y “artesanías”, encuadrando en ésta categoría todo tipo de diseños y creaciones de productos que, sean en serie o no, requieren de un trabajo manual.
Lo que sucede en Capital Federal tiene enormes similitudes con realidades de otras localidades debido a las coincidencias en las necesidades y reclamos por parte de emprendedores que ya están desarrollando actividades, ya que los problemas de comercialización, formalidad, capacitación y créditos son comunes en cientos de personas que buscan consolidar sus micro-emprendimientos.
Muchas veces, los gobiernos locales carecen de políticas acertadas que contemplen el desarrollo de productos artesanales u otro tipo de emprendimiento que no cuenta con el respaldo necesario para formalizarse, mientras que aquellos que sí lo logran también carecen de herramientas para su posterior evolución.
Por ello citamos en Hay que sumar algo destacado desde CAME y la Federación de Comercio de Buenos Aires (FECOBA), que hacen de nexo para que el área de Comercio del GCBA pueda encontrar alternativas que fomenten a los emprendimientos de todos los barrios.
El perfil de quienes hoy se encuentran en esta mesa de trabajo en conjunto es de emprendedores que ya cuentan con una marca propia, con una concreción de su negocio y que padecen los siguientes problemas:
-Dificultades por la falta de financiamiento para comprar más insumos.
-Falta de mano de obra calificada para ampliar producción.
-Imposibilidades de pasar de un monotributo a una figura societaria.
-Altas exigencias bancarias que imposibilitan manejo de cuentas en la formalidad.
-Incentivos a inversión.
-Falta de marcos regulatorios de competencia y permisos.
Por su parte, es positivo que muchos ofrecen sus experiencias y conocimientos para potenciar la cadena de valor en los proyectos, en un contexto de integración empresaria. Por eso, desde CAME ahora están atentos a las evaluaciones de las autoridades mientras que se continuará acompañando a emprendedores en capacitaciones y charlas de debate sobre el desarrollo de los negocios.
Etiquetas: asociativismo, CAME, Ciudad de Buenos Aires, emprendedorismo
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